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jueves, 11 de septiembre de 2014

DÍA 108: THIRTEEN COUNTRIES

Etapa 76: Tbilisi, Georgia - Kechasger, Azerbaiyán  123 Km
Salida: 12:00
Llegada: 20:00
Acumulado: 6716 Km

¡SOMOS LA LECHE! Y con Azerbaiyán ya son trece naciones las que nos hemos papado. Trece patrias y trece grandísimos momentos que nos han ofrecido cada una de ellas.
Adolfo, que durante sus 123 Km de Babieca va más aburrido que oír un partido de ajedrez por radio, le ha puesto un titular  a cada país:
  1. España: ¡Viva el camino de Santiago!
  2. Francia: Atropéllame bien y no mires con quién.
  3. Italia: Como un Ferrari.
  4. Eslovenia: El paraíso existe.
  5. Croacia: 330 kunas dan para un año.
  6. Bosnia: Malditas guerras religiosas.
  7. Montenegro: Visto y no visto.
  8. Albania: Afrikáners en Europa.
  9. Macedonia: ¡Toma pirimetria!
  10. Grecia: Adolfopoulos y sus perros-toulos.
  11. Turquía: ¡Dale al Kebab! 
  12. Georgia: Atrapado entre embajadas.
  13. Azerbaiyán: Desiertos sin fronteras.

Bien, después de este momento supositorio os contaré que en cuanto entramos en Azerbaiyán  nos metimos en un desierto infinito. Hablando de entradas, la frontera Georgia - Azerbaiyán está muy militarizada y nos dieron un poco la brasa. Por suerte ese visado tan duramente peleado en Tiblisi nos ha abierto las puertas de este maravilloso país.

Deberían poner bienvenidos al desierto.

Lo que sufrimos todo el día fue un bochornazo tremendo. Esto es peor que echar un polvo debajo de un plástico, os lo aseguro. Adolfo me ha cargado de agua hasta las manillas.
La etapa ha sido durísima y debimos parar antes pero, como Adolfo es de la teoría de “si no entra trae un martillo más grande”, hemos tirado hasta la extenuación.

Los desiertos como veis no tienen porque ser de arena,
basta con que tengan un calor del carajo y no haya una sombra.

Ahora ya está metido en el doble techo deshecho. A ver cómo se levanta.
Donde dormimos es de impresión. Adolfo antes de salir me dijo que este es el desierto arbustivo de Azerbaiyán, una estepa árida de 64000 Km2 (que enlaza con el desierto de Irán) y que su estado de conservación está en peligro crítico. No tiene mucha bichería pero abunda la gacela persa, una rareza del desierto. A ver si vemos alguna.
Ya os contaré. Chao…
(Os dejo un vídeo...)


1 comentario:

  1. Fai un vento de carallo nesa estepa na que estás! Voga, voga mariñeiro xa se ve.... Asia!!

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